Todas las ciudades tienen lugares que parecen
escondidos aunque están a la vista de todo el mundo. Sólo los turistas se
detienen a contemplarlos y a soñar con quienes los recorrieron en el pasado y
que seguramente también los ignoraron.
La realidad de Medellín va más allá de la imagen oficial. Queremos mostrar el rostro de una ciudad que parece cambiar cada día. Aunque la arquitectura permaneciera inalterada, la atmósfera, la naturaleza y la gente influirían en su aspecto de manera constante.